馃専馃専馃専
Hay experiencias humanas que nos est谩n vedadas para siempre. Los hombres nunca pariremos con dolor en la sala de un hospital, y las mujeres jam谩s sabr谩n lo que es recibir una patada en los cojones. Yo, que he nacido hombre, y que me siento hombre, que tengo asumida esa discapacidad disfuncional de tener un cromosoma Y, nunca sabr茅 lo que siente una persona que nace hombre pero se siente mujer. Qu茅 le pasa por la cabeza cuando se confronta ante el espejo. Qu茅 gesto de extra帽eza, o de asco, o de absoluta indiferencia, acompa帽a la contemplaci贸n de sus propios genitales, de la cara andr贸gina, del t贸rax donde echa de menos unos pechos definidos. C贸mo tiene que ser convivir con esa extra帽a disociaci贸n entre el genoma y la identidad, entre el destino y la elecci贸n personal.
Hay experiencias humanas que nos est谩n vedadas para siempre. Los hombres nunca pariremos con dolor en la sala de un hospital, y las mujeres jam谩s sabr谩n lo que es recibir una patada en los cojones. Yo, que he nacido hombre, y que me siento hombre, que tengo asumida esa discapacidad disfuncional de tener un cromosoma Y, nunca sabr茅 lo que siente una persona que nace hombre pero se siente mujer. Qu茅 le pasa por la cabeza cuando se confronta ante el espejo. Qu茅 gesto de extra帽eza, o de asco, o de absoluta indiferencia, acompa帽a la contemplaci贸n de sus propios genitales, de la cara andr贸gina, del t贸rax donde echa de menos unos pechos definidos. C贸mo tiene que ser convivir con esa extra帽a disociaci贸n entre el genoma y la identidad, entre el destino y la elecci贸n personal.
Los personajes como Lara, la protagonista de Girl, se me quedan un poco en la bruma, en la incomprensi贸n de quien no ha pasado por semejante trance, y no creo que vaya a pasarlo a poco que la naturaleza siga su curso. No creo, sinceramente, que llegado a la edad provecta me pase lo mismo que a Jeffrey Tambor en Transparent. La pereza, para empezar, detendr铆a en seco cualquier intento de reforma.
Gracias a las neuronas espejo me pongo delante de una pel铆cula y entiendo a quien teme perder un hijo, o le rechaza una mujer, o le ponen un fusil en la mano para desembarcar en Normand铆a… Experiencias que he vivido, o que podr铆a haber vivido. Con Lara, sin embargo, aunque simpatizo, no termino de entender. No termino de ponerme en su piel, y el personaje se me resbala, se me escurre entre las comprensiones. Transito por el metraje interesado, respetuoso, pero en realidad bastante aburrido, contemplativo, como si la cosa no fuera conmigo. La pel铆cula, que es muy plana -y no hago un chiste de doble sentido- tampoco ayuda mucho al compromiso emocional. En este trance tan especial de su protagonista, me descubro varias veces repasando la lista de la compra, y la programaci贸n deportiva del fin de semana.
No hay comentarios:
Publicar un comentario