🌟🌟
Cómo sobrevivir en un mundo material es un título engañoso,
falsamente dualista. Porque el mundo sólo es materia, y el espíritu sólo es
materia que sueña con no serlo. El carbono y el hidrógeno, los muy tunantes,
que aspiran a trascenderse en el éter... Una pamplina metafísica. Miseria de
protones que sueñan con vivir por encima de sus posibilidades. Afirmar que el
mundo es material es como afirmar que la piedra es pétrea, o que la carne es
cárnica. No hay más cera que la que arde, vino a decir el abuelo Karl de Tréveris.
Marx nos enseñó la verdad indudable del materialismo dialéctico: la vida es
materia, y la materia es cognoscible, asunto científico. Y todo lo demás -la
fantasía, lo inmaterial, el mundo platónico de las ideas- sólo es el pedo que
nos tiramos para hacer un poco de terapia. Necesario, ma non troppo. No era
exactamente así, ya lo sé, pero yo me entiendo.
Supongo que lo quieren decir los distribuidores españoles
-porque el título original, Kajillionaire, no va por los derroteros de
la filosofía- es que vivimos en un mundo “materialista”, en la acepción de
superficial y rastrero, de interesado y bursátil. Una selva capitalista de
todos contra todos, y sálvese quien pueda. La mar salada de los tiburones y las
pescadillas: los ricos, que nos devoran, y los pobres, que nos devoramos a
nosotros mismos, mordiéndonos la cola. Si van por ahí los tiros, entonces sí,
el título tiene cierta lógica, porque la película cuenta las tribulaciones de
la familia Jenkins para sobrevivir en el mundo hipercalórico y ultraegoísta de California. Unos estafadores profesionales
que en vez de emprenderla con el ricachón se aprovechan del incauto, o del
despistado. Qué lejos queda de California el bosque de Nottingham.,..
Lo que no tiene perdón de Dios -de la idea de Dios, mejor
dicho- es que la materia más hermosa del Universo, Evan Rachel Wood, la única
conformación molecular que podría aspirar a ser inmaterial y divina, aparezca
en la película con unas greñas densísimas, materiales a tope, que enmascaran su
belleza sobrenatural. ¿Para qué? ¿Para aspirar a ganar un Oscar? Evan Rachel
Wood está más allá de estos materialismos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario