🌟🌟🌟
Apenas hace un mes que Kevin McKay perdió a su padre tras una larga enfermedad. Llevaba veinte años sin hablar con él, pero un padre, cuando se muere, siempre es un padre. La pena en estos casos es insidiosa e inevitable.
A Kevin se le ha sumado la pena con la mala vida y se le ve desastrado, mal afeitado, como si comiera mal o ingiriera productos inadecuados. Su madre, además, empieza a dar síntomas de demencia y su hijo adolescente, al que solo disfruta un fin de semana de cada dos, no solo le niega la palabra sino que además le insulta con esa vesania atroz que sólo poseen los hijos americanos.
Kevin McKay, por si fuera poco, está a punto de perder su trabajo como conductor del autobús escolar. En una misma mañana recibe una bronca mayúscula de la supervisora y una llamada de la veterinaria para decirle que su perro no tiene solución y que es mejor sacrificarlo. Y en el horizonte, mientras conduce camino del colegio, surgen unas llamas pavorosas que son como la metáfora de su propia vida que se quema...
Chiquito de la Calzada siempre decía que una mala tarde la tiene cualquiera, pero quedaba implícita la idea de que también se podía tener una mala noche o una mala mañana como ésta de Kevin McKay en California.
Luego, la película, se reconvierte en una de aventuras con autobús escolar escapando del fuego y de la muerte. Una de Paul Greengrass de toda la vida, con su montaje frenético y su tensión in crescendo. Su título original es “The lost bus”, pero aquí, por aquello de buscar el morbo y la confusión, la han titulado “Laberinto en llamas” para ver si la gente se pensaba que esto era un thriller erótico con mucho folleteo. Había una película de Almodóvar titulada “Laberinto de pasiones” y una serie con Úrsula Corberó que se llamaba “El cuerpo en llamas”. No sé... Asociaciones...
Yo, por mi parte, me acordé de aquel autobús escolar que Supermán libraba de caer por el puente de San Francisco. Hace siete años, en los incendios terribles de California, Supermán debía de estar de vacaciones. O en El Ventorro, flirteando con una titi.

No hay comentarios:
Publicar un comentario